El helado de turrón es el clásico entre los clásicos, si olvidamos el de vainilla o chocolate es el que más veces he tomado. Además es el helado favorito de los catadores a los que no les gusta probar helados raros, que dicen ellos. Con un helado de turrón seguro que aciertas, gusta a niños y a mayores a partes iguales y encima si lo haces en casa, puedes aprovechar para reciclar esas tabletas que se quedaron en Navidad.
Lo ideal creo que es hacerlo con turrón del blando o de Jijona, pero de ese nunca sobra en mi casa. Este año ha sobrado bastante del duro y polvorones. Así que me he tirado a la piscina y lo he hecho con turrón del duro y ha sido un exitazo. Mi marido (que es de los que no gustan de helados experimentales), se lo ha comido en un visto y no visto. Gracias que me dejó hacer antes unas fotos.
Como siempre os digo, aunque yo suelo hacer los helados con heladera, se pueden hacer sin ella con resultados muy buenos.
Para hacer este helado necesitamos:
300 gr de turrón duro o blando
120 ml de leche
500 ml de nata culinaria espesa (15% MG)
50 gr de glucosa (podemos sustituir por 50 gr de azúcar)
Partir el turrón en trozos con la manos y poner en un cazo con la leche y la glucosa o azúcar. Lo calentamos sin que llegue a hervir o ponemos al baño maría, para que se deshaga el turrón. Mezclamos hasta que esté todo integrado y cuando tengamos una pasta, trituramos con un turmix.
Si lo preparáis con Thermomix
1º. Pulverizamos el turrón.
2º. Añadimos la leche.
3º. Ponemos a 100º durante 10 minutos, velocidad 3
Una vez tengamos la masa de turrón con el método elegido, añadimos la nata, no importa que tenga trocitos de almendra, mejor, lo dejamos enfriar y pasamos a la nevera para que esté bien frío antes de meter en la sorbetera o lo metemos al congelador si lo hacemos sin ella. Sacamos cada media hora para batir hasta que esté congelado. Pincha aquí para ver la explicación más detallada del proceso.
Es aconsejable sacar el helado 10 minutos antes de degustar, a temperatura ambiente. El helado casero siempre es más duro que el de compra, aunque no es una mala señal, eso quiere decir que no lleva grasas hidrogenadas.
Ya sabéis, ¡a hacer mucho helado casero! No tener heladera no es excusa, aunque tampoco veo excusas para no tener una. Es de los "trastos de cocina", que más satisfecha estoy de haber comprado.
Si queréis echar un vistazo al resto de helados que he preparado últimamente, los podréis encontrar fácilmente en el Recetario dulce.
Pues nada, ya se me han acabado las vacaciones, y además trabajo el fin de semana... pero vosotros, que lo paséis fenomenal, los que empiezan la vacaciones y los que solo disfrutáis del finde.
Qué rico !!!! Pues yo por fin tengo heladera. Así que ya no tengo excusa para entrar en tu recetario de verano. Un besito guapa
ResponderEliminarA mí me falta verano para hacer todos los helados que me gustaría...
EliminarBesos
Susana
Pues fíjate que tengo un par de pastillas de turrón guardadas, a ver si me pongo y lo hago, por que la verdad es que es un helado bien rico.Besitos
ResponderEliminarEstá rico, es fácil y encima te sacas esas pastillas de turrón... ¿qué más se puede pedir?
EliminarUn beso
Susana
Qué ganitas de comerme un heladito de estos!!! Está muy muy apetitoso!!!! Ah! y a mí seguro me faltaría verano para comérmelos todoooodooos!!! Un abrazo.
ResponderEliminarMuy buenas, buscando recetas para gastar los turrones me he encontrado con esta... Y tengo dos dudas...
ResponderEliminar1. No se monta antes la nata?
2. Se puede hacer la misma receta con el turrón de yemas? Es q me han quedado dos de turrón imperial y una de la de yemas 😣
Hola. No montamos la nata pues ésta actúa como elemento graso para aportar cremosidad, no aire.
EliminarPor otra parte, deberías probar a hacerlo con el turrón de yemas. Son texturas parecidas y no veo porque tiene que quedar mal. Aunque yo no lo he probado.
Un saludo
Buscando recetas para aprovechar una pastilla que se habia quedado perdida...he puesto la mitad de todo,ya os cuento...
ResponderEliminar